Para situarnos, os diremos que el 1 y 2 de febrero estuvimos en el Mercado del Ferrocarril de Gijón.
Mira oye, que en primera línea de playa que se encuentra. De la que sales por la puerta del Museo del Ferrocarril -que es el que alberga todo lo que vais a ver-, te topas de frente con este enorme arenal de la playa de Poniente
Total, que preparamos nuestro equipaje y rumbo a la otrora Gigia romana que nos fuimos.
De primeras y de segundas, el colorido, los burritos repletos de vuelos y estampados, percheros y creaciones te "asaltan" por doquier.
Sus acompañantes: sombreros, carteras, maletines, tocados.....
Un rinconcito para los que esperan y "desesperan", eso sí, sentados sobre las bancadas de los antiguos trenes.
El resto, seguimos viaje.
Del menos es más, en estos candelabros de madera....
...a bajar la vista ante esta evocadora camarera.
Bien rodeados,,, que visitantes, muchos (miles dicen). Muuuy bien acompañados todo el fin de semana.
La locomotora que custodia este corner nos recuerda que estamos en un museo.
Claro que también girabas una esquina y DE REPENTE, estos otros chicos y sus Vespas. Vaya cachondeo se gastaban..
Los que reponían fuerzas o necesitaban "momento Kit Kat", se pasaban por nuestro estand,
y cercanías. En estos apeaderos, perfecto maridaje entre el queso, las setas y anchoas con el vino de la tierra, ¡Ñam Ñammmm!!
Y aquí el próximo viaje. Volveremos a subirnos a este tren.
Hasta entonces...sed buenos.
Besos a todos.
L.P.S.